A 60 km/hora por la AP-7: la oleada de accidentes impulsa cambios drásticos en la principal autopista de Cataluña
La reducción de velocidad en un tramo de 150 kilómetros es una de las medidas estrella para rebajar la siniestralidad

La autopista AP-7 vivió ayer una nueva jornada complicada, con cuatro incidencias en pocas horas que provocaron afectaciones en tramos que, en conjunto, conforman hasta 21 kilómetros de vía. En plena crisis por el debate del traspaso de Rodalies, que ayer vivió otra jornada marcada por múltiples incidencias en el servicio, la AP-7 es otro foco de conflicto en la movilidad catalana: Desde que se retiraron los peajes en agosto de 2021, el aumento en la afluencia de vehículos ha disparado la siniestralidad. Esta tendencia ha puesto sobre la mesa del Servei Català de Trànsit (SCT) la necesidad de impulsar medidas drásticas para desahogar la principal autopista de Cataluña. La más llamativa es la instauración de un largo tramo de velocidad variable que, eventualmente, podría limitarse a 60 kilómetros por hora.