Barrenderos en México, un empleo que el Gobierno a veces no paga: “Tenía que sobrevivir de las propinas de la gente”
En México existen al menos 10.000 trabajadoras y trabajadores voluntarios dentro del servicio público de limpia sin ser reconocidos como trabajadores, de acuerdo con un estudio de la organización WIEGO


“Quítate del camino, pinche estorbo”, grita una señora que pasa en su Chevy blanco. Rogelio, de 42 años, ocupa el carril izquierdo de la calle Puebla, frente a la parroquia de la Sagrada Familia, en la colonia Roma Norte. Empuja un carrito de metal con el que transporta tres tambos en los que deposita la basura que recolecta barriendo las vías que le son asignadas. Ha sido barrendero desde 1991. Tenía ocho años cuando empezó en el oficio. Rogelio le responde a la señora, también con gritos e insultos, que se calle. “A esto nos enfrentamos todos los días”, dice indiferente. Es el desinterés de alguien que ya está acostumbrado a los maltratos y las dificultades que conlleva su trabajo: las injurias y los salarios. “Ahora ya estoy en la nómina y me pagan 2.300 pesos quincenales (unos 112 dólares). Pero durante mucho tiempo tenía que sobrevivir de las propinas de la gente”.