Cuando viajar es experimentar
De Asturias a la isla de Tenerife, naturaleza, gastronomía y cielos estrellados en seis de las iniciativas presentadas a los Premios Fitur Turismo Activo 2025
Entre las 10 tendencias que guiarán al turista español en 2025, según Hosteltur, hay tres que apuntan a un segmento que sigue cogiendo vuelo tras la pandemia, el turismo activo: escoger destinos con menos carga turística y alternativas más sostenibles; un creciente interés por visitas a lo largo del año, favoreciendo la desestacionalización, y una preferencia por escapadas breves con experiencias locales que complementen el viaje. Escogemos seis propuestas entre las iniciativas presentadas a los Premios Fitur Turismo Activo 2025, que se entregan desde hace 25 años en colaboración con la revista Aire Libre.
Observar el cielo día y noche
“Ahora mismo podemos ver una alineación de cuatro planetas del sistema solar: Venus, Marte, Júpiter y Saturno. ¿Y qué más? La nebulosa de Orión, Tauro, las Pléyades, la galaxia de Andrómeda…”, enumera Uxue Fabo, guía para la interpretación del cielo nocturno en Entre Encinas y Estrellas, un alojamiento que ofrece experiencias de astroturismo en Fregenal de la Sierra (Badajoz). Pero lo que diferencia a este complejo con certificación Starlight e integrado en el destino Dark Sky Alqueva es que también invita a contemplar el firmamento a plena luz del día, con actividades de observación solar para conocer, por ejemplo, las estaciones del astro —“ahora mismo estamos pasando por un máximo solar”, aclara Fabo—, entender el porqué de las recientes auroras rojas divisadas en España o concebir sus dimensiones reales: “El sol representa el 99,8% de la masa de todo el sistema solar”, explica la experta. Gracias a un telescopio especial Lunt Doble Stack 130, alojado en el peculiar observatorio R2-D2, “atraviesas la corona del sol y ves la corteza, las manchas solares, las llamaradas”, que, según la experta, tienen hasta cuatro veces el tamaño de la Tierra. “Y lo ves en directo, cómo evoluciona. Cada día el sol tiene una pinta distinta”, apuntilla.
Pedaleando entre naranjos
La afición cicloturista de Santiago Alandí, quien cada año hace un viaje en bici, “y siempre me preguntaba por qué no hacer lo mismo en mi territorio”, así como su constatación de que “ha cambiado la tendencia y prácticamente todos los viajeros buscan primero qué hacer y después dónde dormir” fueron dos de los detonantes de Mediterranean Bike Tours, una agencia que organiza rutas de cicloturismo comprometido en la comarca valenciana de Camp de Morvedre. Bajo la marca slow cycling, “ese turismo calmo, sostenido, que invita a disfrutar de la compañía, de la conversación, del paisaje, de la gastronomía”, agrega Alandí, proponen travesías para todos los públicos y dificultades aprovechando rutas cercanas como la vía verde Ojos Negros o El Camino del Cid; los campos de naranjos de la zona o el paisaje del parque natural Sierra Calderona. Una de estas experiencias, Bike & Orange (desde 40 euros; mediterraneanbiketours.com), invita a mezclar precisamente cítricos y pedaleo. “El recorrido discurre entre naranjos por el valle del Palancia, donde estamos nosotros, y se visita una explotación [agrícola] donde, además de conocer cómo funciona, recogen sus propias naranjas y realizan una cata de zumos”. Y claro, “normalmente acabamos con una auténtica paella a leña”, remata Alandí.