El Bachillerato Internacional, un modelo para cultivar la pasión por aprender y el pensamiento crítico
Desde Primaria hasta el acceso a la universidad: casi 6.000 centros de todo el mundo adoptan un modelo académico que aporta una educación superior en competencias y valores

Ana Hidalgo recuerda sus años de Secundaria como una época de frustración constante: era buena estudiante, sacaba las mejores notas y, sin embargo, sentía que ni el sistema se adaptaba a ella, ni ella al sistema: “No le encontraba sentido al formato de clases magistrales, al aprendizaje memorístico ni a los currículums exageradamente densos en contenidos que resultaban inabarcables e imposibles de recordar una vez pasado el examen”, explica. Tenía interés por aprender, pero en su instituto no lo encontraba. Hasta que cumplió los 16 y encontró en el Bachillerato Internacional todo lo que había buscado hasta entonces: un modelo que fomenta el espíritu indagador, el pensamiento crítico, un aprendizaje significativo y competencial, una mentalidad abierta y la empatía necesaria para querer cambiar el mundo que le rodea.