El empresario Aldama siguió maniobrando tras su detención en febrero por el ‘caso Koldo’
Un informe de la Guardia Civil destaca que la trama de hidrocarburos, que supuso el segundo arresto del comisionista, tenía “un grado de peligrosidad elevado”
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil mantiene que el empresario Víctor de Aldama no escarmentó con su primera detención en febrero de 2024, cuando se le arrestó por su implicación en el caso Koldo —la trama de corrupción que anidó en el Ministerio de Transportes en época de José Luis Ábalos (PSOE) para conseguir contratos públicos a cambio de favores—. Según un informe del instituto armado, pese a que entonces ya se sabía que el comisionista estaba en el punto de mira de los investigadores, Aldama intensificó y continuó con sus oscuros negocios relacionados con una organización criminal especializada en el fraude del IVA en el sector de los hidrocarburos y en el blanqueo de capitales, que provocó su segunda detención en octubre del pasado año.