El Errejón de las Navidades futuras
Lo que hace relevante la causa contra el exdiputado por agresión sexual es cómo todas las premisas de cierto feminismo se han acabado volviendo contra uno de sus grandes defensores
Del caso Errejón, lo menos interesante es el caso en sí: el político solo tiene una denuncia de las tres que, según Cristina Fallarás, autoproclamada libertad guiando al pueblo de este proceso, se le iban a interponer. Y parece que el relato de la denunciante, Elisa Mouliáa, incurre en algunas contradicciones, como señaló anteayer en sede judicial la defensa del fundador de Podemos. Algunas atañen a los detalles de la presunta agresión sexual, como que, según la primera versión de la actriz, Errejón cerró un pestillo que en esta segunda ha desaparecido —dice Mouliáa que fue un añadido de la Policía—.