El mar devora parte del paraíso naturista de Vera, en Almería, y el alcalde pide la construcción urgente de espigones
El último temporal de levante inunda varias calles y urbanizaciones en primera línea, situación que se repite con cada vez mayor frecuencia en este tramo del litoral almeriense
La playa naturista de Vera (Almería, 18.224 habitantes), ubicada en pleno casco urbano, tiene dos kilómetros de longitud y entre 30 y 50 metros de ancho. Es un amplio arenal que se llena de turistas cada verano, pero que estos días de invierno ha desaparecido bajo el Mediterráneo. El reciente temporal de viento y olas coincidió con la marea alta y el mar se adentró por varias calles de la localidad y el interior de urbanizaciones como Natsun o Vera Natura. También La Menara, a casi 300 metros de la costa. “De repente el agua subía por todos lados. Era impresionante, como un pequeño tsunami”, cuenta Manoli Martínez, vecina que vive en la zona desde hace más de dos décadas. Lo hace en un bajo. “Igual la próxima vez me tengo que subir al ático de algún vecino para refugiarme”, asegura respecto a una situación que se repite con cada vez mayor frecuencia en la zona. La última ocasión ocurrió hace apenas tres meses, a finales de octubre.