El ombligo de Europa

La Unión ha ido postergando las decisiones más difíciles, como la de construir una defensa común, y ha preferido verse reflejada en la radiante imagen de sus grandes valores

Mar 7, 2025 - 05:00
El ombligo de Europa

La verdadera batalla que va a librar Estados Unidos en los próximos años, tanto económica como tecnológica —y también geopolítica—, es con China por el dominio del mundo, así que quiere concentrarse en poner sus medios y sus energías en el Pacífico. La guerra en Ucrania, en ese sentido, le resulta un engorro. Ha facilitado por lo pronto que China arrastre a su lado a Rusia —o si se prefiere, que Moscú se eche en los brazos de Pekín—, y a Washington no le interesa tanta complicidad. Ucrania, por otro lado, quiere formar parte de la Unión Europea, y Bruselas le ha abierto una rendija para que pueda entrar en ese selecto club en los próximos años. Trump piensa, por tanto, que deberían ser los europeos los que se ocupen de asistir a su vecino en estos momentos difíciles. Por eso, cuanto le llega de Ucrania —las peticiones de Zelenski para que vele por su seguridad— lo considera un lastre. A Trump le importa poco la cantinela de los derechos humanos y le resultan ajenos los viejos valores ilustrados que dieron impulso a la rebelión de los colonos de Norteamérica contra Gran Bretaña o a la Revolución Francesa. De interesarle alguno podría servirle el de la libertad, pero en su sentido negativo, como fuerza que derriba cualquier obstáculo y despeja su camino para ejercer el poder sin demasiadas trabas.

Seguir leyendo