El paseo por la ciudad como acto poético y rebelde: de Baudelaire a la turistificación
Coincidiendo con la crisis urbana y de vivienda varios ensayos destacan el deambular ‘psicogeográfico’, una forma de habitar la urbe prestando atención a la injusticia y al encuentro con lo maravilloso en lo cotidiano

“Es curioso que haya quien crea que cruzar una calle es lo mismo que cruzar una calle. Porque no lo es”, escribe Julio Monteverde (parafraseando a Cortázar) en Psicogeografía. Trayectoria de un método (Pepitas de Calabaza). La diferencia entre cruzar una calle y cruzar una calle es estar presente. Así podría definirse la práctica psicogeográfica: el tránsito consciente de la urbe, cuando el paseante atraviesa la ciudad, pero la ciudad también atraviesa al paseante. La urbe como exploración y aventura; el caminar como actividad revolucionaria.