El patriotismo antiespañol
La España real nunca ha importado a los patriotas, atraídos desde siempre por las ficciones identitarias de su gloria

El nacionalismo patriótico español aplaude a Donald Trump y celebra su autoritarismo, aunque sus órdenes vayan en contra de España y el español. No es rara esta postura del patriotismo español en la Historia. Desde que traicionó la Constitución de 1812 para ponerse al servicio del absolutismo francés, no ha hecho otra cosa. Durante 40 años pagamos su decisión de venderse en 1936 al nazismo alemán y el fascismo italiano. Ahora utiliza la bandera para aplaudir a Trump. Les fascina su autoritarismo, pero no le preocupan las facturas que pagarán los españoles y el español si el mundo, la Declaración Universal de los Derechos Humanos y las instituciones internacionales no encuentran el modo de oponerse a sus planes.