El presidente cesado de Corea del Sur se niega a declarar un día después de su detención
Yoon Suk-yeol obstaculiza la investigación mientras un tribunal rechaza revocar su arresto
Yoon Suk-yeol, el presidente de Corea del Sur cesado por el Parlamento el pasado diciembre, continúa obstaculizando el trabajo de las autoridades que lo detuvieron el miércoles por la mañana en la residencia presidencial. Mientras, un tribunal ha rechazado este jueves revocar el arresto, que el mandatario había impugnado por considerarlo ilegal. La Oficina de Investigación de la Corrupción de Altos Funcionarios (OICAF) intenta sustentar su acusación contra el hombre que el 3 de diciembre promulgó durante seis horas la ley marcial en el país, desatando la mayor crisis institucional en décadas. Tras pasar la noche en un centro de detención cercano a Seúl, el líder conservador, de 64 años, se ha negado a cooperar en la segunda jornada de interrogatorios, alegando problemas de salud, según ha comunicado la OICAF.