Jeff Bezos logra poner en órbita el New Glenn, el cohete con el que hacer frente a Elon Musk
La compañía Blue Origin estrena su gran lanzadera espacial, diseñada para convertirse en alternativa a la supremacía de SpaceX, y supera el principal objetivo de su misión inaugural aunque no logró aterrizar el propulsor en su regreso a la Tierra
Lo ha conseguido, por fin. Han pasado 25 años desde que el magnate tecnológico Jeff Bezos fundó Blue Origin y a esta compañía espacial se la conocía solo por sus carísimos vuelos suborbitales para millonarios, a quienes asoma al espacio unos instantes y les otorga un pin de astronauta privado de dudosa validez. Esa reputación ha empezado a cambiar hoy, con el estreno de su primer cohete para competir en serio en la carrera espacial. Es el New Glenn: una lanzadera espacial pesada, destinada a competir con los Falcon de Elon Musk llevando satélites y sondas al espacio; y que aspira incluso a superarlos, pues está diseñado para lanzar módulos capaces de aterrizar astronautas en la Luna.