La banca de inversión suspiraba por Trump y en un mes ya hace caja
Las elecciones marcan un punto de inflexión, con Goldman creciendo a triple dígito. La desregulación en marcha agiganta la brecha con Europa
Cuentan quienes se han acercado al entorno del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, que el líder republicano escruta diariamente a los mercados financieros y la Bolsa como barómetros de lo que pasa en la economía. También, como eventuales catalizadores de la acción política. “Viene del mundo empresarial y él es el primero que tiene acciones, claro. Piensa que, si una medida impacta negativamente en los mercados, puede no ser una buena decisión política, y viceversa. Por eso, es de esperar que las cosas que afirma y que no parecen sensatas terminen difuminándose”, expone un banquero de larga trayectoria en el sector. Los primeros beneficiados de las decisiones que sí va a tomar sin inmutarse, aquellas que a priori no tienen contraindicaciones para el parqué, ya lo están notando en sus resultados y en su cotización. Podría abrirse una nueva edad de oro para ellos.