La desaparición de un fontanero destapa una red de tráfico de cocaína en una remota zona de Granada
Francisco Jesús P. S. murió a tiros tras perdérsele la pista cuando iba a trabajar en la reforma de una casa-cueva del líder de la banda, el pasado septiembre

La desaparición de un hombre en septiembre del año pasado ha permitido, seis meses después, determinar que no fue por voluntad propia sino que se le perdió la pista tras morir asesinado, y que, además, los asesinos formaban parte de una banda de tráfico de cocaína que operaba en la zona norte de la provincia de Granada. Su cadáver fue hallado este domingo enterrado en la sierra de Almaciles, a 100 kilómetros del último lugar donde se lo había visto, tras venirse abajo uno de los detenidos en la Operación Almonta, que ha desmantelado la trama, con 10 detenciones, y ha desvelado la triste suerte de Francisco Jesús , de 39 años, natural de Caniles. Su autopsia ha determinado que murió por arma de fuego.