La desapercibida vida extramuros

Ávila desborda su propia muralla para entregar planes menos conocidos, como la visita a un castro vetón con hallazgos recientes o a una dehesa en la que se crían vacas de raza avileña-negra ibérica, el origen del chuletón que se sirve en el parador

Jan 23, 2025 - 17:00
La desapercibida vida extramuros

A la carrera y de forma traumática abandonaron los vetones el castro de la Mesa de Miranda, a 22 kilómetros de Ávila. Una fíbula (un broche) y unos anillos de bronce hallados el pasado noviembre prueban que se fueron a toda prisa sin llevarse lo más preciado, y nunca más volvieron, ni el asentamiento se saqueó. Era el siglo II a. C., eran las guerras celtibéricas. El arqueólogo Juan Pablo López y su equipo fueron quienes encontraron las joyas, pero podría haber participado en la excavación un vecino de Chamartín (el pueblo de al lado) o un cliente del parador de Ávila que vino con la muralla y Santa Teresa en mente y se vuelve con una nueva afición. Los trabajos son comunitarios, cuenta López. Los técnicos tutelan los proyectos, pero involucran a todo el que muestre un poquito de interés: “Que me llame quien quiera, que yo les traigo a esta gran ciudad protohistórica”, invita el arqueólogo en el castro, delante de un campo de piedras hincadas, un elemento defensivo para frenar a la caballería. “Lo que hacemos es etnoarqueología. Buscamos que la gente conecte emocionalmente con el paisaje”, añade sin misticismo, eso es cosa de la Santa.

Seguir leyendoVista de Ávila desde el humilladero de los Cuatro Postes, un monumento de 1566.El arqueólogo Juan Pablo López, en el castro de la Mesa de Miranda, donde reanudarán las excavaciones con la llegada del buen tiempo.Una vaca de raza avileña-negra ibérica en la dehesa en la que pasta, en la sierra de Ávila.

Redacción y guion:

Mariano Ahijado

Coordinación editorial:

Francis Pachá

Fotografía:

Pablo Monge

Desarrollo:

Rodolfo Mata

Diseño:

Juan Sánchez

Coordinación de diseño:

Adolfo Domenech