La nueva arquitectura que convierte el espacio escolar en instrumento didáctico
Nuevas tendencias en el diseño de los centros educativos buscan crear entornos dinámicos e interactivos que fomenten el aprendizaje activo y el bienestar del alumnado

En los últimos años, la arquitectura escolar ha experimentado una auténtica revolución conceptual para dar respuesta a las necesidades cambiantes de los alumnos y adaptarse a las nuevas metodologías educativas que han emergido en tiempos recientes. Trabajando codo con codo, arquitectos y pedagogos se han nutrido de campos como la psicología ambiental y la neurociencia para diseñar colegios innovadores que potencian el bienestar y contribuyen a reemplazar la dinámica de enseñanza tradicional por un enfoque de aprendizaje activo y participativo.
Cuando las pistas deportivas mutan en recintos inclusivos
Durante los años ochenta y noventa los colegios invirtieron en la construcción de pistas deportivas con el fin de fomentar la práctica del ejercicio físico. Sin embargo, esta oleada de instalaciones provocó que los patios escolares quedaran prácticamente ocupados por campos de fútbol o baloncesto, lo que a su vez generó una exclusión involuntaria de aquellos niños y niñas que no practicaban ambos deportes.
Como respuesta, la nueva arquitectura escolar busca transformar estos recintos en entornos más inclusivos y multifuncionales. La clave, explica Elena Bolarín, CEO de EmotionLab, no está en eliminar el deporte, sino en equilibrar el uso del espacio para que todos los niños, independientemente de sus intereses o habilidades, puedan disfrutar del recreo. Por ello, destaca que la tendencia es adaptar las pistas deportivas para dar cabida a otras actividades, como juegos creativos, espacios de socialización y zonas verdes.
Santiago Atrio, director del grupo de investigación Escuela en Arquitectura Educativa de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), coincide en que las instalaciones deportivas han evolucionado. “Ya no se enfocan solo en deportes tradicionales como fútbol o baloncesto, sino en una educación física integral que abarca la motricidad humana, la salud y el bienestar. Las nuevas tendencias buscan espacios deportivos versátiles y adaptados a diversos usos pedagógicos”, señala Atrio.
Fermín Blanco, fundador de la plataforma educativa Sistema Lupo, incide en que el deporte es fundamental, “pero la pista puede generar una percepción de riesgo si no se gestiona adecuadamente. Se debe considerar la diversidad de actividades que se pueden realizar en el patio”, ahonda.
En paralelo a la transformación de los patios, los gimnasios de los colegios también están siendo adaptados para ser más versátiles. “Muchos los están adaptando para que sirvan no solo para educación física, sino también para actividades extracurriculares, eventos musicales o incluso reuniones. Esto responde a la necesidad de aprovechar mejor los espacios grandes y sin equipamiento fijo, aumentando su funcionalidad”, subraya Bolarín.
La arquitecta también destaca que otra tendencia es utilizar paletas de colores vivos, materiales sostenibles y una buena iluminación y acústica para reconvertir los gimnasios en lugares donde no solo se estimula el ejercicio físico, sino que también se motive a los estudiantes y se promueva su bienestar.