La pobreza infantil española es una lacra impropia de una buena sociedad
Vivir la infancia en desventaja socioeconómica supone un lastre que en la mayoría de los casos es insuperable
La sociedad española presenta un rasgo absolutamente anómalo: es el país europeo con mayor pobreza infantil, con la única excepción de Rumania. Uno de cada tres niños y niñas viven en situación de pobreza y exclusión social. Y uno de cada 10 padece una situación de carencia material severa, una situación de especial gravedad. Esto es una anomalía impropia de un país como el nuestro.