La retribución flexible, el círculo perfecto: gana el empleado y gana la empresa
El pago de una parte de la nómina en especie eleva el valor real del salario para el trabajador, a la vez que beneficia a las compañías que la incorporan

Cuando das con una dirección por la que todos llegan a la meta, pero a la vez todos ganan, sin trampa ni cartón, es que es la correcta. Eso ocurre con la retribución flexible. Se trata de un sistema en el que la clave va implícita en su propia denominación, “su flexibilidad”. Y el prometedor futuro de este tipo de retribución va unido a que la empresa esté dispuesta a hacer todos los estiramientos que sean necesarios para que su flexibilidad aumente cada año.