La soledad de Mazón
Los lectores escriben sobre la gestión de la dana, las tierras raras de Ucrania, la precariedad del estudiante universitario y los problemas de concentración en el aula
Carlos Mazón no acudió a la Crida, que es el acto que anuncia el comienzo de las Fallas, como han hecho todos los presidentes de la Generalitat. En su lugar, prefirió irse a Madrid para participar en un desayuno informativo, lejos de los insultos y las pitadas que últimamente le acompañan allí donde va, incluso en Orihuela, donde el PP gobierna con mayoría absoluta. Tras cargar contra el Gobierno de Pedro Sánchez y eludir cualquier responsabilidad, Mazón afirmó que era un daño colateral de las mentiras del presidente. Oírle hablar de mentiras cuando ha dado diferentes versiones sobre dónde estuvo la tarde del 29-O es cuanto menos un insulto a todas las víctimas de la dana. Debe dar las explicaciones oportunas en el Parlamento y no en Madrid. Alberto Núñez Feijóo no puede destituirle, pero sí puede convocar una gestora. La jueza de Catarroja que investiga penalmente la dana ha sido muy clara al afirmar que la gestión de la misma era competencia autonómica. La responsabilidad política recae en el presidente de la Generalitat. La penal, si la hubiera, la determinarán los tribunales.