Las familias del monte de Tameiga ganan el partido al Celta de Vigo: el club acepta achicar su ‘megaciudad’ deportiva
El equipo firma la paz con los comuneros tras siete años de conflicto y renuncia a imponerles en sus tierras un multiusos para 10.000 espectadores y un estadio con 4.000 asientos

Han sido siete años de conflicto con 430 familias propietarias de un monte comunal, azotado por denuncias en los tribunales, presiones políticas, concentraciones de protesta y descontento incluso entre las peñas del club. Pero la paz ha llegado. El Celta de Vigo renuncia a construir parte de su megaciudad deportiva en los terrenos forestales de Tameiga, un suelo que la Xunta pretendía incluso expropiar ante la resistencia de los afectados. Los comuneros han aprobado el pacto en asamblea este domingo. Temían por los acuíferos y los bosques que surten de agua y leña sus casas y ni siquiera sucumbieron a las ofertas millonarias que les llegó a plantear el equipo. Finalmente, la sociedad deportiva no construirá en sus tierras ni el multiusos para 10.000 espectadores, ni el estadio con 4.000 asientos, ni los aparcamientos. La comunidad de montes, que a cambio deberá poner fin a la batalla judicial contra el proyecto, califica el acuerdo de “gran éxito”. El Celta también lo considera “fantástico”, porque “permite la convivencia entre la defensa del monte y del agua por la comunidad y el crecimiento deportivo”.