Las ganancias del Guantánamo de Bukele: 20.000 dólares por preso al año y el favor de Trump
Con el cuestionado envío de migrantes de Estados Unidos a El Salvador, el presidente centroamericano busca más que beneficios económicos, empezando por la convalidación de su modelo carcelario, según analistas consultados por EL PAÍS

En una nueva puesta en escena con ambiciones de producción cinematográfica, el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, exhibió ante el mundo el pasado domingo otro video de su megacárcel, el Centro de Confinamiento para el Terrorismo (CECOT). En el video, decenas de policías someten a varios hombres esposados de manos y pies, meten a algunos en carros blindados y a otros en autobuses y los trasladan hasta la prisión, donde los rapan y les ponen ropa blanca de reo. Lo más sorprendente es que esta vez los nuevos internos no son solo pandilleros de la Mara Salvatrucha 13 y del Barrio 18, los grupos criminales para los que fue construida la prisión, sino también —según la versión del Gobierno de Donald Trump— presuntos miembros de la banda venezolana Tren de Aragua. Todos deportados desde Estados Unidos.