Lo que Georgina nos enseña de la Supercopa en Arabia Saudí
Por cada Sócrates, cada Cantona o cada Kroos tenemos a miles de peloteros que jamás se atreverían a denunciar el racismo, la homofobia o el machismo. Tampoco Gio, que nos invita a vivir en ese país de las maravillas que ella misma ha ido dibujando en su cabeza
Ningún aficionado que se precie debería privarse del mayor placer que nos puede proporcionar esta Supercopa de España vendida al mejor postor por dos pillos del negocio con el beneplácito de los grandes clubes: aprovechar los descansos de los partidos para consultar las publicaciones en redes de Georgina Rodríguez, una de las grandes celebridades españolas del momento y la mejor embajadora para un país, Arabia Saudí, que la aragonesa considera, textualmente, maravilloso, seguro y muy familiar.