Los pájaros de Max Ernst se acomodan en el Bellas Artes de Bilbao
El museo vizcaíno expone el depósito de 54 obras del primer pintor que se sumó al surrealismo

Max Ernst (Brühl, Alemania, 1891-París, 1976) fue el primer pintor al que eligió André Breton para que se uniera al movimiento surrealista. El autor del manifiesto había visto cómo el artista alemán era capaz de reinventar el mundo destruyendo toda lógica visual. Dos exposiciones celebradas en París en 1926 certificaron su pertenencia al surrealismo y le confirmaron como uno de los grandes. Fue en la galería de Aram Mouradian y Leonard van Leer en 41 de la rue de Seine. Muchas décadas después, una gran parte de aquellas obras (54) han sido depositadas en el Museo de Bellas Artes de Bilbao durante cinco años. Artista difícil de disfrutar en colecciones públicas españolas (El Reina Sofía posee dos cuadros y el Thyssen, cuatro), el museo vizcaíno dedica tres salas al artista. La exposición del legado, comisariada por Miriam Alzuri Milanés, estará abierta hasta el 30 de junio. Una vez que termine la muestra y cuando concluyan las obras de ampliación del museo, el depósito se trasladará a las salas de la colección permanente.