Los seguidores de Sheinbaum mantienen la prudencia: “Es pronto para opinar”
Cientos de miles de personas se arremolinan en el centro histórico capitalino para celebrar los primeros 100 días de gobierno de la mandataria morenista
La política mexicana avanza a un ritmo vertiginoso desde que la presidenta, Claudia Sheinbaum, juró el cargo hace tres meses. Un signo de los tiempos, en realidad, del que no escapa ningún país. La reforma judicial que prometía acaparar la agenda y los focos ocupa ahora un discreto segundo plano, desde donde sigue su cauce a trompicones y no exenta de problemas. Pero nadie se acuerda de ella, ni para bien ni para mal, en este domingo de cielo encapotado y agradable resol. La mandataria cumple 100 días en el Gobierno y lo celebra, como ya hizo su predecesor en innumerables ocasiones, con un baño de masas en el Zócalo de la capital, atascado en sus principales entradas desde las nueve de la mañana. Hasta allá han peregrinado cientos de miles de personas para escuchar el balance que la presidenta hace del comienzo de su mandato, pero el entusiasmo fiel que los ha llevado ahí contrasta con sus opiniones matizadas y prudentes sobre la acción del Gobierno durante este periodo.