Málaga cumple diez años como ciudad de los museos
El Centre Pompidou y el Museo Ruso celebran su primera década con más luces que sombras y convertidos en referentes culturales tras una inversión millonaria

Llegaron de la mano para afianzar la apuesta cultural. Uno, dispuesto a convertirse en el icono contemporáneo. El otro, con el objetivo de ampliar los límites de la ciudad y atraer al visitante más allá del centro. Málaga estrenó la primavera de 2015 con la apertura de las filiales del Centre Pompidou y el Museo Estatal de San Petersburgo. Y una década después, hay muchas luces y algunas sombras en una trayectoria que no sería posible sin una inversión millonaria. Hasta ahora han supuesto un coste de 75,3 millones de euros para las arcas municipales, según se recoge en los presupuestos anuales. Cifra que crecerá tras la renovación al alza del contrato con la matriz francesa: solo en 2025 ya supera los 10 millones, a pesar de que el centro ruso tiene su continuidad en el aire desde la invasión de Ucrania.