“Mi madre me dio las semillas y tenían todos los colores del arcoíris”: la historia de los ‘guardianes del maíz’ en México
Una exposición de fotografía rinde homenaje a la manera de cultivar y preservar este cereal por parte de una familia en la localidad de San Juan Ixtenco, donde resisten ante el avance de las multinacionales, los químicos y las maquinarias pesadas

A las faldas de La Malinche, uno de los volcanes más antiguos de México, Juan Simón Angoa asegura que siembra y cosecha 16 razas nativas de maíz. Su madre, antes de fallecer, le dio como herencia una caja con esas semillas y ahora dedica su vida a preservarlas en sus tierras en la localidad de San Juan Ixtenco, en el Estado de Tlaxcala. Desde hace ocho años, la fotógrafa mexicana Malena Díaz, oriunda de esta región, acompaña y documenta el trabajo de Angoa, que forma parte de los llamados “guardianes del maíz”, por las prácticas tradicionales y el conocimiento ancestral que han sabido mantener.