Miguel Ventura, cocinero y poeta: “Compré antes un libro de poemas que una espumadera”
El hostelero, que regenta hace 20 años el restaurante Badila, en el barrio madrileño de Lavapiés, recoge sus composiciones literarias en ‘Pétalo para construir lo inmenso’
Hoy está preparando cocido madrileño, chipirones en su tinta, judías verdes salteadas con anchoa y mantequilla, lasaña y paté caseros, carrillada estofada con vino tinto, emperador fresco con pesto piamontés de perejil e incluso algunos platos más. Por las mañanas, Miguel Ventura (Madrid, 52 años) va al mercado y luego cocina en su restaurante, Badila, una casa de comidas que montó en el madrileño barrio de Lavapiés hace 20 años, después de pasar por una editorial jurídica donde aprovechó su carrera de Derecho. No le desagradaba, pero no era lo suyo. Ahora por su local se deja caer el vecindario, las gentes de la cultura, algún turista. Manteles de papel, menú del día, precio asequible, pero bueno y casero.