Milpa, la huerta ancestral que ejerce de escudo contra la comida basura y la crisis climática en Guatemala
Un colectivo estimula el retorno a este método de cultivo tradicional y preserva semillas nativas en un santuario, para proteger la biodiversidad, fortalecer la identidad cultural y garantizar la soberanía alimentaria


El guía espiritual kaqchikel Tat Tomás Cosijuà Tuiz enciende una a una las velas rojas, amarillas, blancas y negras, los colores del maíz nativo guatemalteco, y las alinea en un brasero. En su casa de adobe en Chaquijyá, una aldea en el departamento de Sololá, cerca del lago de Atitlán, observa en silencio cómo las llamas titilan, proyectando sombras sobre hojas de tabaco, una efigie de Maximón y botellas de cusha, un aguardiente ceremonial que arde como fuego puro.