Mont-roig del Camp airea su secreto para ser una turbina generadora de ocupación en el sur de Cataluña
Los registros de viento permanente incentivan la llegada de dos inversiones millonarias con un impacto de 1.100 puestos de trabajo


Los aires de Mont-roig del Camp (Tarragona) le sirvieron al artista Joan Miró para curarse de los achaques de una enfermedad que contrajo cuando era joven, y esas mismas corrientes le valen ahora al municipio para vitaminar la economía del sur de Cataluña. El pueblo, de 14.000 habitantes y situado a una veintena de kilómetros de Tarragona y Reus, se ha erigido en motor de creación de empleo tras lograr atraer a dos inversiones millonarias, de sectores tan distintos como la automoción y la agricultura, con capacidad para generar 1.100 puestos de trabajo.