Montero resiste y se aferra a que si no gana la batalla del IRPF el salario mínimo no podrá subir más
Sumar cuestiona las cifras de Hacienda y recuerda que no se tocarían todas las rentas: solo hasta 21.000
María Jesús Montero vivió una jornada parlamentaria muy dura, una de las más intensas que ha tenido en su carrera, con seis preguntas alrededor de su decisión de que el salario mínimo, que ha subido un 61% desde que Pedro Sánchez está en La Moncloa, pague por primera vez IRPF. Algunos en el Congreso, incluso diputados socialistas, creen que no tiene sentido el desgaste político que está sufriendo ella, que además de ministra de Hacienda es candidata del PSOE en Andalucía, y está así dando una baza a su rival, Juan Manuel Moreno. Sin embargo, ella, que es la principal promotora de esta decisión (distintas fuentes señalan que es la vicepresidenta la que convenció a Sánchez de que había que hacer esto este año, y ya pensó en hacerlo el pasado, porque si no, según su visión, se hacen insostenibles más subidas del SMI) aguanta la posición y está dispuesta a dar la batalla hasta el final. Y resolverla como siempre en política: con los votos. En teoría tiene las de perder, porque solo el PSOE la apoya en el Congreso, pero Montero insiste, según su entorno.