Ocho estancias singulares en la Costa Brava
En la comarca del Empordá esperan palacetes, fortalezas militares, masías, ‘campings’ y castillos reconvertidos en alojamientos en los que se mezclan historia, encanto y la esencia de lo auténtico
Aunque se lleva todas las miradas en verano, la comarca del Empordà (Girona), con sus jardines, rutas y gastronomía, se puede disfrutar durante todo el año. Y, para hospedarse, nada mejor que nuevos alojamientos singulares, alejados del turismo y la masificación, donde el valor de la proximidad es fundamental. A lo largo de la Costa Brava se distribuyen palacetes, antiguas fortalezas militares, masías, campings y castillos reconvertidos en estancias hoteleras donde se mezclan la historia, el encanto y los esfuerzos para preservar la esencia de lo auténtico.