Philippe Boxho, el forense que ha vendido un millón de libros: “No tengo miedo a la muerte, lo que me asusta es la forma de morir”
El médico belga, un fenómeno editorial en los mercados francófonos, cuenta en su primer libro traducido al castellano casos sorprendentes en el ejercicio de su profesión, con ingenio y cierto humor negro

Lo peor de tratar con cadáveres es cuando entran en estado de putrefacción y emiten un hedor atroz. “Es un olor repulsivo, muy fuerte, se huele perfectamente, se mezcla con la saliva y acabas saboreándolo. Es insoportable”, dice Philippe Boxho. Curiosamente, lo recomendable no es salir corriendo, como pide el cuerpo, porque así se puede provocar el vómito. Lo indicado es aguantarse y permanecer: cuando el olor sature los receptores de la nariz, se hará mucho más liviano. Desde que practica este oficio, este médico no puede comer carne madurada: le sabe a cadáver putrefacto.