Por qué la soledad escogida sí es buena para los niños: del desarrollo de la imaginación a una mayor independencia
Muchos menores no saben qué hacer cuando no tienen una actividad programada o una tarde llena de juegos, pero el aburrimiento puede ser clave en su aprendizaje. Tener tiempo para uno mismo, aprender a escucharse, cultivar sus gustos o entrenar sus valores son algunos de los regalos que aporta

La soledad suele relacionarse con una percepción o sentimiento negativo porque se tiende a pensar que aquel que está solo es porque no tiene con quién estar. Pero lejos de ser cierto, la soledad elegida, aquella que el ser humano escoge de manera voluntaria, es un auténtico regalo para uno mismo. Sin embargo, para poder disfrutarla es necesario primero aprender a vivir la soledad desde la infancia desde un enfoque positivo o incluso neutro, es decir, sin emplearla jamás como un castigo, sin darle una connotación negativa ni entendiéndola como algo asocial o perjudicial para uno mismo.