“¿Que qué falló? ¡Todo!”: 30 años de ‘Street Fighter, la última batalla’, la película que casi acaba con Van Damme
Pese a tratarse de uno de los títulos más vilipendiados de los noventa, la adaptación del videojuego homónimo fue un éxito comercial. Las vicisitudes del rodaje o sus excentricidades la han mantenido viva y reivindicada
Con Sonic 3: La película tumbando en taquilla nada menos que a la apuesta navideña de Disney, Mufasa: El rey león, son tiempos de bonanza para las nunca muy bien vistas películas basadas en videojuegos. El año pasado, Super Mario Bros: La película fue el mayor éxito comercial de la historia de estas adaptaciones, mientras que Five Nights At Freddy’s, traslación de la franquicia homónima independiente, se convirtió en otro fenómeno, aunque la crítica no recibiese ninguna de ellas con entusiasmo. Sin olvidar la (esta sí, aclamada) serie The Last Of Us. Las explicaciones van de lo demográfico, porque el público mayoritario ahora domina estos títulos o los ha jugado, al modo en que dichas versiones se articulan: en la era del fan service, hemos visto cambiar a contrarreloj el diseño de un personaje para agradar a los seguidores con la película completada, como pasó con la primera Sonic (2020), o plegarse a las fuentes y estética como fin en sí mismo, aunque la narrativa se resienta por acumulación de referencias.