Quién es Mariann Budde, la obispa que plantó cara a Trump
La religiosa, que aprovechó la ceremonia que puso fin en la catedral de Washington a la toma de poder presidencial para pedirle piedad, ya se enfrentó al republicano en 2020
La somnolienta resistencia en Washington ―y en el mundo― a la nueva presidencia de Donald Trump, un colectivo desalentado y ansioso por dar con nuevos referentes, recibió este martes como un rayo de esperanza la irrupción en escena de Mariann Edgar Budde, obispa episcopaliana de la capital de Estados Unidos, quien, en el tradicional servicio religioso que pone fin a los fastos de la toma de poder presidencial, mantuvo la calma y, ante una audiencia que las redes sociales convirtieron después en planetaria, pidió a Trump que “tuviera piedad de la gente que tiene miedo ahora”. Se refería, lo aclaró a continuación, a la comunidad LGTBI+, a los trabajadores migrantes indocumentados, a los refugiados y al resto de colectivos vulnerables que están en el punto de mira de la nueva Administración.