Sabinares, aldeas perdidas y torres mudéjares en el Alto Palancia, la desconocida montaña de Castellón
Esta comarca esconde parajes que resumen las esencias del paisaje mediterráneo, arroyos que juguetean entre peñascos y el rico patrimonio histórico de Segorbe, Jérica o Bejís

La cabecera del río Palancia, un valle escondido entre las últimas estribaciones del sistema Ibérico y la costa mediterránea, es hoy una comarca tranquila y apacible, de paisajes serranos y pequeñas aldeas diseminadas a orillas de ramblas y arroyos, con un rico patrimonio histórico —visible en las huellas romanas, árabes y mudéjares— y artístico, que, sin embargo, ocupó un lugar estratégico en las comunicaciones entre Valencia y el reino de Aragón.