Sánchez intenta resistir la ola militarista europea
España se encuentra con una política europea girada hacia la derecha, pero la batalla aún está abierta
En La Moncloa no salían de su asombro. Mark Rutte, secretario general de la OTAN, se tiró de lleno el miércoles a una piscina donde no parece haber agua: “España quiere llegar al 2% [del gasto en defensa] este verano”. Toda la maquinaria del Gobierno se puso en marcha para desautorizarlo y exigirle una marcha atrás. Según fuentes del Ejecutivo, Pedro Sánchez incluso le escribió un mensaje directamente al ex primer ministro de Países Bajos, con el que tiene una larga y buena relación, pese a algunos desencuentros fuertes, especialmente cuando se negociaban los fondos europeos en 2020 y el liberal era de los más duros.