Sheinbaum sitúa las desapariciones de personas en México en la primera línea de la política
La presidenta anuncia una batería de medidas para atajar un asunto que sobresalta al país con múltiples escándalos
La búsqueda de personas desaparecidas es un asunto que ha incomodado a varios gobiernos en México y supone una de las grandes rémoras para que el país pueda alcanzar un estatus de modernidad democrática. Las desapariciones suceden a diario, pero cada sexenio cuenta con su particular escándalo mediático que sacude los cimientos del poder. A Claudia Sheinbaum le ha tocado uno muy temprano. El hallazgo de cientos de objetos, ropas y restos humanos en el rancho Izaguirre de Teuchitlán (Jalisco) puede no ser una novedad entre los capítulos de violencia de este país, pero las imágenes publicadas han dejado un desasosiego de holocausto del que es imposible desviar la mirada. Este lunes, la presidenta ha anunciado diversas medidas destinadas a poner orden en el desbarajuste administrativo en que se desenvuelven las búsquedas de desaparecidos. Las varias reformas legales pretenden unificar los descontrolados registros de identificación que hay por el país, empezando por los datos con los que cuentan las fiscalías y los servicios forenses para que pueda cruzarse la información. Sheinbaum ha leído el texto en el que detalla las medidas a tomar y ha tomado partido inequívoco con las víctimas. Puede ser solo un gesto, pero se diferencia de posiciones que se tomaron en Gobiernos anteriores.