Soñar despierto, el último lujo del Orient Express
Entramos en el vagón-suite más opulento del Venice Simplon-Orient-Express. Una mezcla de observatorio astronómico y gabinete de curiosidades ideado por el artista urbano JR, quien ha creado un espacio que premia la curiosidad y el arte de fantasear propios de viajes de otros tiempos. En marzo se unirá al legendario convoy.
El artista urbano francés JR, tan rebelde e iconoclasta, acaba de claudicar ante el mito definitivo: el legendario Venice Simplon-Orient-Express. Con la cara medio oculta entre unas gafas oscuras y un borsalino negro, confiesa: “Es mi segundo viaje. Cogí el tren ayer en la mañana en Venecia, atravesé los paisajes nevados de Austria, las montañas de Suiza, me tumbé en la cama, miré al cielo abierto, y me desperté en París”. La conexión del artista es profunda. De adolescente dibujó sus primeros grafitis en trenes subterráneos y fue en un túnel del metro de París donde encontró la cámara con la que empezó a documentar sus trabajos. “Si pudiera, solo viajaría en tren”, asegura.