Starmer defiende su política económica ante la presión de los mercados
El encarecimiento de la deuda pública envalentona a la oposición conservadora. Algunos analistas sugieren que el Gobierno laborista vive su ‘momento Liz Truss’,
En otras circunstancias, la anécdota habría dado para muchas bromas. En el momento de debilidad actual del Gobierno británico, resulta reveladora. La ex primera ministra conservadora Liz Truss, que en su breve mandato de apenas 50 días hundió la deuda pública, la libra esterlina y la credibilidad internacional del Reino Unido, ha enviado al primer ministro laborista, Keir Starmer, un requerimiento legal para que deje de decir precisamente eso: que por culpa de ella los mercados entraron en pánico. Si Downing Street se obstina en seguir contando la verdad ―entiéndase la ironía―, Truss amenaza con acudir a los tribunales.