Tocará rascarse el bolsillo: esta es la factura para el gas y la luz que le espera en 2025
Este año los ciudadanos pagarán más por la energía. Los impuestos, la alta demanda y las tensiones geopolíticas afectarán a las carteras
En 2025 el consumidor de a pie va a pagar más por la luz, el gas y los carburantes. Los impuestos —los nuevos y los recuperados—; el (mal) funcionamiento del mercado mayorista eléctrico; la disminución progresiva de ayudas; las tensiones geopolíticas, y la evolución de la demanda derivada de inteligencia artificial (IA) entre otros factores, tendrán un impacto notable en los bolsillos. “El año 2025 [en electricidad] se inicia con una clara tendencia alcista y el regreso de la incertidumbre”, aseguran los analistas de Grupo ASE. La clave, el nivel de las reservas de gas con que acabe el invierno en Europa. “La climatología y la demanda asiática de gas natural licuado [GNL] seguirán marcando la evolución de los precios de la energía, con la volatilidad como protagonista”, añaden. Con matices, hay un mínimo común denominador en las previsiones de los grandes grupos energéticos: estabilidad en los precios del petróleo; precios del gas más altos en Europa, y precios eléctricos estables o algo más altos en España.