Un juez desclasifica la petición de visado de Enrique de Inglaterra tras admitir que consumió drogas
La fundación conservadora Heritage lleva meses exigiendo que los documentos se hagan públicos para ver si el hijo de Carlos III mintió en su visado o si obtuvo trato de favor. Ahora, esos más de 80 folios no demuestran nada

Cinco años después de mudarse a Estados Unidos, la residencia del príncipe Enrique de Inglaterra (Londres, 40 años) en el país parecía estar en la cuerda floja. Una asociación conservadora llamada Heritage había exigido al Gobierno y ante un juez revisar su petición de visado, después de que el hijo de Carlos III de Inglaterra admitiera haber consumido drogas en el pasado, algo que podría poner en peligro su estatus migratorio. Tras meses de tiras y aflojas, este martes el juez finalmente ha decidido hacer públicos esos documentos. El resultado: poca cosa. Pero no parece que, por el momento, Enrique tenga que marcharse del país deprisa y corriendo.