“Un tío que lee en el metro es más sexy que uno que mira el móvil”: cómo los libros se han convertido en reclamo erótico
En las aplicaciones de ligue triunfan los usuarios que se definen como lectores, prosperan los clubes de libros donde leer no es el único fin y en las redes sociales la imagen de un hombre con un libro cotiza al alza. ¿Es la cultura la nueva herramienta para ligar?

“Masculino, trajeado y rico”. Así era el hombre perfecto el año pasado, pero según datos procedentes de Tinder, en 2025 el hombre más buscado tiene, en vez de una cartera de inversiones, un libro. La prensa de tendencias parece pensar lo mismo: “La cosa más caliente que puede hacer un hombre es leer”, dicen desde la biblia de las tendencias Dazed & Confused. Desde la aplicación para encontrar citas, sexo y pareja aseguran que las menciones a la lectura han aumentado un 16 % en las biografías de sus usuarios, de lo que se podría deducir que un hombre que lee ha alcanzado o se ha puesto a la par de los bros de las finanzas. Otra señal del sex appeal de la lectura es la aplicación Klerb, conocida como “el Tinder de biblioteca”. Se trata de una app en la que los match nada tienen que ver con el físico, sino con los gustos literarios de sus usuarios. “Buscar a una posible pareja lea lo mismo que tú puede ser otra manera de conectar vuestros intereses”, asegura la sexóloga de Diversual Lucía Jiménez.