Una Defensa europea es posible
Con audacia y ambición histórica, la UE tiene bases sólidas para alcanzar la autonomía militar que necesita para garantizar su futuro

Europa puede defenderse. Dispone de recursos equiparables a los de cualquiera, de una industria de la defensa propia y de una motivación sólida. La ciudadanía apoyará un esfuerzo del que depende la supervivencia de sus valores y de su estándar de vida, si se le habla con claridad y sin subterfugios. Contra una narrativa pesimista y reaccionaria, la Unión Europea ha demostrado ante la invasión de Ucrania que es capaz de sacrificios propios, en ahorro energético o soportando una inflación desbocada, para mantener su apoyo al país violentado por Rusia. El sostenimiento de Ucrania y la construcción de una auténtica Defensa común europea son las dos caras de una misma moneda.