Una marcha del petrismo frente a la casa de la senadora Nadia Blel agudiza el enfrentamiento entre el presidente y el Congreso
Senadores y representantes a la Cámara independientes y de oposición cuestionan que en las protestas hayan participado funcionarios del Ejecutivo y las califican de “acoso y persecución” por haber llegado hasta la intimidad de una parlamentaria

La relación entre el Gobierno de Gustavo Petro y la oposición en el Congreso se deteriora con el paso de los días. Esta semana parece haber llegado a un punto de no retorno después de que un grupo de simpatizantes del presidente marchara en Cartagena hasta la casa de la senadora conservadora Nadia Blel para criticarla por haber votado contra la reforma laboral. Participaron el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, y varios congresistas del oficialista Pacto Histórico. “Estamos acá para decirle al Congreso y a los congresistas que se hacen elegir en nombre del pueblo, que tienen que legislar para el pueblo, no para su familia”, dijo una de las mujeres frente al hogar familiar de Blel. La movilización, convocada por la Coordinadora Departamental por el Cambio, buscaba criticar al Congreso por hundir las reformas sociales del Gobierno.